Hoteleros y gastronómicos preocupados por una segunda ola de contagios en Santa Cruz: “Un cierre sería lapidario para la actividad”

Paulo Lunzevich realizó estas declaraciones en el programa “Arriba el Día”, que se emite por Radio Nuevo Día. Existe una gran preocupación por lo que pueda ocurrir con la pandemia. “Estamos muy alerta y atentos al avance de la vacunación, porque estamos muy preocupados por la segunda ola”, manifestó.
En principio dijo que, en cuanto a un análisis frío “la temporada no fue buena, pero teniendo en cuenta que estamos en un periodo de pandemia y luego de estar 10 meses parados, es una temporada que ha servido para que una parte de la actividad pudiese tratar de equilibrar un poco las cosas, o por los menos estos meses tratar de cubrir sus costos”.

La temporada tuvo un compartimiento “muy diverso y disperso a lo largo y ancho de todo el país, puntualmente lo que tiene que ver con nuestra provincia, los lugares que se han destacado son El Calafate y Chaltén, el resto no ha tenido grande movimientos”. “Un poco Río Gallegos en función del paso a Tierra del Fuego que por el tema del horario de la frontera hizo que tuviese algunos movimientos, pero es muy salteado y esporádico que tenía que ver básicamente con cierres de quincenas y movimientos que fueron generando alguna actividad en la ciudad”.
Pero hay datos a tener en cuenta. Lunzevich destacó que hay que tener presente que “la cantidad de establecimientos cerrados es importante, siempre se habla de números de ocupación pero tiene que ver con la oferta que está abierta”.
A modo ejemplificador dijo que en Calafate “tenemos una ocupación que rondo el 40 y algo por ciento, con algunos picos de fines de semana santa pero tiene un poco más del 40% de la oferta cerrada y el Chaltén el 30% cerrado, pero con una ocupación un poco más alta que Calafate”.
En cuanto a la capital, Río Gallegos tiene “el 20 o 25 por ciento de la oferta está cerrada y la ocupación es bastante baja, no llego al 20 por ciento”. Aunque si destacó que “de estar cerrados a tener que por lo menos ocuparse de ir a los negocios y demás tener alguna activad es importante”.  
Distinto es el caso de la gastronomía que “afortunadamente en el mes de febrero hemos tenido un tiempo muy bueno y eso ha llevado que esta iniciativa de atender en las veredas ha dado su resultado sobre todo en los espacios para públicos jóvenes”. “El público mayor ha sido más cauto y no ha salido tanto y repercutió en los locales destinados para ellos que no han tenido una cantidad de cubiertos adecuados para tener un resultado parecido al resto de los establecimientos”.
Finalmente Lunzevich aclaró que “estamos muy alerta y atentos al avance de la vacunación porque estamos muy preocupados por la segunda ola porque un cierre nuevamente, en el estado que están las empresas hoy, sería lapidario para la actividad”.